BALEAN A COMERCIANTE

Chilpancingo Gro. Septiembre 19’ 2011. Mientras dormía en el interior de un negocio aledaño al mercado Baltazar R. Leyva Mancilla, el comerciante Enrique Villa Morales, fue sorprendido por un desconocido que le dio un balazo en la cara y después huyó.

Enrique Villa Morales, de 30 años de edad, es originario de Tlatlauquitepec, en la Región de la Montaña pero desde hace varios años radica en esta capital con domicilio actual en calle Río de Janeiro, de la colonia Guerrero.

Trascendió que desde hace siete años trabaja en un puesto de frutas con razón social “Hermanos Garrido”, que se localiza en prolongación Cinco de Mayo de la colonia Caminos y a pocos pasos del mercado principal de esta capital.

Otro empleado del mismo negocio narró que ayer poco después de las veintitrés horas la mayoría de los trabajadores se retiró del local para ir a esperar la carga que llega de la ciudad de México y otros lugares, por lo que solo él y Enrique Villa se quedaron y se dispusieron a descansar un rato.

Enrique se metió bajo una de las mesas donde se exhibe la mercancía y su compañero se acostó al lado contrario, despertando al escuchar una fuerte detonación dentro de la frutería y al levantar la cabeza no logró ver a nadie.

Enseguida el joven escuchó que Enrique Villa se quejaba y pedía ayuda, por lo que se levantó llevándose una gran impresión al ver que una gran cantidad de sangre brotaba de su rostro y la parte posterior de la cabeza, por lo que le ayudó a caminar y salieron del negocio.
El disparo del arma de fuego llamó la atención de policías municipales que llegaron enseguida y al ver el estado de salud del lesionado solicitaron la presencia de paramédicos, arribando en breve personal de Protección Civil del Estado, quienes lo trasladaron a un Hospital y señalaron que su estado de salud es sumamente delicado.

Al mirar hacia el interior de la frutería los uniformados se dieron cuenta que había una gran cantidad de sangre sobre el piso y unas cajas de cartón, impidiendo el paso a los otros empleados indicando que un agente del Ministerio Público del Fuero Común tomaría conocimiento de los hechos y agregando que al fondo del negocio se lograba ver un cascajo de bala al parecer calibre 9mm.